Los días 15 y 16 de octubre se realizó en la sede nacional de la CTA una jornada de trabajo y formación para las compañeras de ammar de las distintas filiales. El encuentro tuvo como objetivo armar un plan de trabajo para el próximo año, haciendo énfasis en la necesidad de profundizar el tema de la ley que regule el trabajo sexual autónomo, continuando con la conformación de mesas de trabajo en las distintas filiales para debatir el proyecto, y pensando y elaborando otras estrategias para promover y defender la ley.
El otro eje que se trabajó fue sobre las problemáticas actuales que están teniendo las compañeras en sus ciudades con la sanción de varios decretos provinciales y municipales que prohíben los locales de diversión nocturna y las whiskerías. A los largo y ancho del país, se están tomando estas medidas con la excusa de combatir la trata de personas, sin embargo, se ignora que muchos de estos lugares constituyen las fuentes laborales de muchas trabajadoras sexuales. Estas políticas perjudican y clandestinizan aún más al trabajo sexual y si bien ammar siempre estuvo en contra de la trata, las compañeras manifestaron que muchas veces entienden que deben salir a aclarar esta cuestión, porque en ocasiones son acusadas de defender a la patronal, al proxeneta. Nada más alejado de esto, puesto que ammar pelea por un trabajo sexual autonomo, una lucha que se torna cada vez mas díficil porque el ejercicio de esta actividad se encuentra en un vacío legal y hay grandes negocios detrás de ella. Por lo tanto, ammar entiende que una ley que regule el trabajo sexual ayudaría a terminar con muchas mafias y a combatir la trata de personas.
Del taller participaron referentes de ammar Salta, Santiago del Estero, Mendoza, Entre Ríos, Rosario, La Plata, Capital, Río Negro y Ushuaia,
Entre las expectativas del encuentro, las compañeras coincidieron en que fue un año muy difícil para las mujeres que optan libremente por el ejercicio del trabajo sexual, y que es importante empezar a llevar a cabo más acciones, a empoderarse más, a fortalecerse y unirse, para resistir a los que quieren avasallar los derechos humanos y laborales de las trabajadoras sexuales.