El pasado sábado la vivienda fue clausurada. En el lugar ejercían siete mujeres, seis de ellas vivían ahí. Durante el allanamiento los gendarmes les retuvieron el dinero y los preservativos que les entrega el Ministerio de Salud. También les cortaron el agua, la luz y el gas.
El procedimiento se llevó a cabo en la mañana. Primero las llevaron a la comisaría para averiguación de antecedentes, después les clausuraron el lugar. Ante la insistencia de una Trabajadora Sexual para llamar a su hijo uno de los policías le respondió “Ah te hubieras buscado un trabajo más digno”, luego a otra que era dominicana le dijeron “Por qué no te vas a prostituir a tu país”.
“Nos estan dejando sin trabajo. Nuestras compañeras se quedaron en la calle y se les llevaron todo el dinero. Estamos cansadas de la persecución policial y de que vulneren nuestros derechos. Todo esto sucede porque existe un vacío legal que nos obliga a trabajar en la clandestinidad. Nosotras solo queremos trabajar tranquilas y por eso reclamamos una ley que regule el Trabajo Sexual” dijo Teresa Godoy, Secretaria General de Ammar Nqn
En Argentina el Trabajo Sexual no es delito pero tampoco está regulado. Además existe una confusión entre Trata y Trabajo Sexual que habilita allanar los departamentos privados y quienes ejercen de manera consentida son siempre sospechadas de ser víctimas. En este contexto, la Asociación de Mujeres Meretrices de la Argentina Ammar reclama por la regulación del Trabajo Sexual Autónomo.
Muchos medios titularon que se había allanado y clausurado un prostíbulo, lo cual promueve una mirada estigmatizante hacia la labor de las Trabajadoras Sexuales. La batalla cultural para acabar con la discriminación hacia quienes se dedican al Trabajo Sexual también es discursiva, por esta razón las meretrices decidieron convocar a una conferencia de prensa en el lugar donde ejercían antes de la clausura y mostrar porqué denuncian persecución policial.